Pon el filtro encima. Todos los Chemex vienen con un filtro especial de papel grueso que elimina los sedimentos finos y la grasa del café.

Humedecemos el filtro con agua caliente para que se pegue mejor al vaso y elimine todos aquellos componentes que no queremos en el café.

Vacía el agua de la cafetera Chemex y vuelve a colocar el filtro.

Agrega el café y golpea suavemente la cafetera para que se asiente bien. Te aconsejo que añadas una cucharita de café por cada taza de café que quieras preparar.

Vierta un poco de agua caliente con un hervidor y déjelo reposar durante 30 segundos a 1 minuto. En esta fase solo queremos humedecer el café antes de prepararlo y así mejorar su aroma.

Puedes ir añadiendo el agua, pero siempre de forma circular para una buena emulsión y oxigenación del café. Aplica un total de 150ml de agua por cada taza de café que vayas a preparar.

Puedes quitar el filtro y solo tienes que mover un poco la cafetera y ¡listo! Ahora puedes saborear el exquisito sabor del café filtrado de un Chemex.